Hoy veo las fotos de aquellos días en que vestía de blanco y visitaba a mis pacientes en sus habitaciones, escuchaba no solo de su dolor físico, también de sus preocupaciones, llevaba en mis manos una bandeja de medicamentos para sanar sus cuerpos y una conversación para tratar de sanar y fortalecer el alma.
Como olvidar al señor Pascualli, a la pequeña Juanita, a mi querido Fabio, pacientes que me regalaron grandes lecciones para la vida desde aquellas camas de hospital, pero hoy tengo otras historias que contar desde mi oficina y son otros los pacientes que siguen dándome lecciones, Cesitar, Juanpis, Taty, Nico, Yesid y cientos de pacientes que siguen enriqueciendo mi ejercicio profesional, pero sobre todo mi vida.
Hace muchos años cuando trabajaba en la Fundación Santa Fe, un joven escritor, que fue mi paciente, me regalo uno de sus libros, al abrirlo había escrito para mi “No sé tu nombre, pero se me ocurre uno: VIDA”…….Y pienso que es la mejor definición de lo que es una enfermera, es vida y cada uno de los que ejercemos esta profesión tenemos una pasión, transformar dolor en ESPERANZA.…..FELIZ DÍA COLEGAS!!!
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